Doble embrague

En un mundo dominado por las cajas automáticas de doble embrague, especialmente cuando hablamos de coches deportivos, hablar de este doble embrague puede parecer curioso. Es un truco pensado, como el punta tacón, para mejorar la vida útil del embrague, no obstante, es una técnica que está en horas bajas. El objetivo de esta es prácticamente lo mismo que el punta tacón, es decir, sincronizar los ejes de la transmisión ante un cambio de marchas, no dejar que las revoluciones se caigan demasiado para evitar tirones y, de paso, conseguir una transición entre marchas más eficaz. ¿Cómo se realiza? Pues dando un toque de gas cuando el coche está desembragado. Es más fácil de realizar que el punta tacón, pero yo lo que te recomiendo es que seas suficientemente rápido cambiando para evitar que las revoluciones caigan en exceso cuando se está cambiando de marcha. Para esto simplemente tienes que ser rápido con el embrague y con la palanca de cambios, una sincronización entre manos y pies que también se consigue con mucha práctica.

Frenos

Termino con una técnica clave a la hora de conducir de manera deportiva: saber frenar. El Freno es clave pero hay varios elementos clave para no fallar a la hora de reducir la velocidad en una conducción deportiva y que no siempre se tiene en cuenta: un elemento clave para frenar bien es el estado de los neumáticos. También es importante que elementos técnicos como los latiguillos o el liquido de frenos esté en un estado óptimo. El objetivo a la hora de frenar bien es tener clara la zona de frenada: esta siempre se debe producir antes de la curva, de tal manera que se ataque el viraje ya con el pie derecho sobre el pedal del acelerador. Hay que controlar muy bien la presión de frenada, así como el reparto de pesos en cada momento para evitar sustos. Frenar en el medio de la curva tiene muchos riesgos, dos son los principales: si frenas demasiado fuerte y bloqueas el neumático, tienes el riesgo de que haga acto de presencia el subviraje y te vayas recto. La segunda es que al frenar en medio de la curva, todo el peso se va hacia el eje delantero y se queda la trasera mucho más ligera, en medio de una curva las fuerzas centrífugas pueden hacer acto de presencia y hacer acto de presencia el sobreviraje. Así que recuerda: frenar siempre antes de la curva, buen estado de los frenos y buen estado de los neumáticos clave para disfrutar de un día de conducción deportiva.